Durante la pandemia la tecnologa est demostrando, una vez ms, su utilidad y, por tanto, su futuro como va de resolucin de conflictos.
Para el arbitraje, la aplicacin de las herramientas tecnolgicas ha resultado ser la palanca que necesitaba para consolidar y poner en valor sus indiscutibles ventajas. La implementacin y empleo normalizada de las soluciones tecnolgicas no solo refuerza las existentes caractersticas de tales procedimientos -flexibles, prcticos, transnacionales etctecera- sino que potencia su agilidad y seguridad, reduciendo adems sus costes, «democratizando» su acceso.
As lo han entendido las grandes instituciones arbitrales de todo el mundo. stas, desde Nueva York, Londres, pasando por Sel, hasta Pars, empujadas tambin por la actual crisis de salud, se han apresurado a regular la aplicacin de la tecnologa a sus procedimientos arbitrales. Este rpido ajuste se ha logrado gracias a la naturaleza pro resolutiva, pactista y flexible del propio sistema arbitral, que ha permitido el seguir administrando justicia, dando solucin a los procedimientos en curso y dirimiendo, incluso en tiempos de confinamiento, nuevas disputas.
Haciendo uso de esta capacidad de adaptacin, estas instituciones han emitido protocolos que abordan, entre otros, los requisitos tcnicos que deben concurrir para que los procedimientos arbitrales tramitados virtualmente gocen de todas las garantas procesales. Ciberseguridad, proteccin de datos, confidencialidad, conectividad, velocidad de las conexiones, requisitos en la prctica de la prueba online, accesibilidad a documentos, identidad de las partes, e incluso ajustes de usos horarios en arbitrajes internacionales, son algunos de los asuntos que tratan.
La Asociacin Americana de Arbitraje (AAA) (juntamente con el Centro Internacional para la Resolucin de Disputas (ICDR)) con sede en Nueva York ha promulgado un modelo para la optimizacin del uso de las audiencias virtuales, incluyendo detalles tcnicos como que las sesiones tengan una identificacin (ID meetings) individualizadas o que los participantes atiendan usando conexiones de Internet seguras y no pblicas porque presentan el riesgo de que terceros ajenos al procedimiento puedan «infiltrarse». Esta institucin, en particular, incluso va ms all y ya dispone de un software y herramientas online especficas para la resolucin de disputas.
Desde Nueva York ya se ha identificado cmo la falta de previsin en temas tcnicos puede comprometer las garantas del proceso. En igual sentido, el Chartered Institute of Arbitrators de Londres ha emitido una gua recomendando, en la medida de lo posible, el uso de la tecnologa para la celebracin de audiencias, que pueden ser enteramente o parcialmente en remoto, y regula aspectos concretos como la no accesibilidad a las deliberaciones del tribunal arbitral. El Protocolo de Sel sobre Vdeo Conferencias en Arbitraje Internacional da respuesta a varios temas controvertidos: uno de ellos es el interrogatorio de testigos y los requisitos formales que se han de contemplar al tomar declaracin (i.e. mesas despejadas, claridad visual del testigo), otro es la calidad tcnica de las retransmisiones exigindose por ejemplo ciertas velocidades de transmisin o la resolucin HD como tecnologa mnima standard. Este grado de detalle es de gran utilidad ya que soluciona aspectos concretos que, de resolverse, caso por caso, comporta retrasos.
Centrndonos en Europa, subrayar la tarea de la Cmara de Comercio Internacional (CCI) de Pars, que en abril pasado promulg un modelo respecto a protocolos cibernticos en aras a organizar las audiencias virtuales.
De forma ms global, hay que destacar cmo instituciones de todo el mundo han cooperado para logar acuerdos en materia de seguridad tecnolgica. El Consejo Internacional de Arbitraje Comercial (International Council for Commercial Arbitration – ICCA), la Asociacin de Abogados de la Ciudad de Nueva York (New York City Bar Association) y el Instituto Internacional para la Prevencin y Resolucin de Conflictos (International Institute for Conflict Prevention and Resolution – CPR) con el apoyo de la Corte Permanente de Arbitraje de la Haya han elaborado conjuntamente el Protocolo en Ciberseguridad en Arbitraje Internacional (Edicin 2020), un marco normativo para que tribunales, partes e instituciones arbitrales tengan una gua en cuanto a las medidas de seguridad aplicables a procedimientos arbitrales.
Los esfuerzos realizados para acompasar tecnologa y derecho marcan el camino de futuro. Nos debemos felicitar por este avance, polinizarlo a todas aquellas instituciones que an no la han incorporado y trabajar para revertir la disposicin material del arbitraje de base y tradicin presencial a una mayor realidad virtual. Solo as, podremos minimizar las reticencias al uso -tiempo y costes- de la figura del arbitraje y darle un acceso ms transversal, un nuevo horizonte.
Hemos de entender que el arbitraje es un activo social. Las instituciones que reconocen este hecho son las mismas que estn realizando este esfuerzo por ajustar sus protocolos a la realidad tecnolgica, las que gestionan el mayor nmero de casos en el mundo y las que, por tanto, cuentan con mayor capacidad para incidir en el devenir de la sociedad. Si a mediados del siglo XX, el arbitraje se posicion como respuesta a los problemas que planteaba la globalidad de los negocios (hoy por hoy sigue siendo el mecanismo de resolucin de disputas que mejor entiende el elemento internacional) ahora debe seguir abriendo camino a otra realidad, haciendo uso de la tecnolgica como medio para lograr una mayor proximidad y accesibilidad social.
Incorporando estos ajustes, el arbitraje podr afianzarse como un mecanismo generoso, til y funcional, corrigiendo ciertas disfunciones y dispuesto a asumir su responsabilidad social.
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