La evolución de la pandemia parece llegar a un estado de meseta, favorecida por el prometedor comportamiento de Haro, la cabecera de comarca que ha venido manteniendo niveles aceptables de contagios junto a Santo Domingo de la Calzada, y por la recuperación global de toda la Rioja Alta, donde adquieren especial protagonismo los descensos advertidos en Nájera y Cenicero.
En la Capital de los Reyes la cifra de contagios sujetos a control de la Consejería de Salud se reduce de forma sensible para situarse en 40; en la ciudad vinatera caen hasta la decena. Y con ello favorecen el control de los casos positivos en Casalarreina, que se movía ayer en 5; Santo Domingo, que veía cómo se reducían a 6; Ezcaray; aliviado con tan sólo 3; y la localidad jarrera, donde siguen contenidos en 4.
Aunque parece evidente que la esperanza que comenzó a alimentarse ayer en el conjunto de la Comunidad viene justificada por el giro en redondo que ha experimentado esa misma estadística en las cabeceras de la Rioja Baja, el espacio donde mayor avance había experimentado el coronavirus a lo largo de las últimas semanas.
No es para menos. De acuerdo con los datos facilitados por el Gobierno regional, en Calahorra se detectó un prometedor desplome de los índices de contagio, rebajando en 16 los casos positivos (de 146 a 130), un comportamiento que también se constató en Arnedo (pasaron de 85 a 77) y se vio favorecido por la parada en seco de Alfaro (de 45 se pasó a 44), girando la tendencia al alza en todo ese ámbito regional y en la capital riojana, donde se produjo por fin un simbólico retroceso después de cinco días consecutivos de expansión (de 171 cayeron a 163).
En términos globales, La Rioja presentaba ayer una imagen más aseada tras asistir al alta médica de 54 afectados por el Covid-19. De los 681 afectados sujetos a control médico el pasado sábado se pasó a los 627 de este domingo, 54 menos. Aunque la repercusión de estos prometedores avances en la incidencia acumulada tardará en dejarse ver (hasta el viernes se movía en los 268 casos por cada 100.000 habitantes en dos semanas, después de haberse elevado a 281 en la anterior jornada).
El resto de los registros que definen la situación real de la pandemia en la región, los que detallan el número de decesos que se ha producido en estos tres últimos días y la presión que soporta el servicio hospitalario de la región, se conocerá a lo largo de la mañana de hoy aunque en el conjunto del país ya parece adivinarse una mínima mejora en el escenario sanitario al que los especialistas miran con reojo para constatar su consolidación a corto y medio plazo.
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