El presidente del organismo, Cristian Pereyra, recordó que «esta es una planta que poseerá tecnología de vanguardia. Realizará el tratamiento de los líquidos cloacales generados en la zona de la Margen Sur y beneficiará a 26.000 vecinos en una primera etapa y 52.000 en una ampliación posterior».
El funcionario precisó que «en esta oportunidad se ha hormigonado el perímetro de tabiques, lo que requirió unos 80 metros cúbicos de material, y las columnas del sector del reactor biológico, donde se utilizaron 17 metros cúbicos».
Explicó que, una vez concluida esta obra y la nueva planta de pretratamiento que se construirá en el sector norte de Río Grande, junto con otras obras complementarias, se logrará «el tratamiento del 100% de los efluentes cloacales de la ciudad».
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