El juez Édgar Gustavo Ramírez Rodas, quien interina el Juzgado Penal de Garantías Nº 2, resolvió otorgar medidas alternativas a la prisión preventiva a la obstetra Cintia Raquel Echeguren, una de las dos procesadas por la muerte de la joven brasileña Sheiza Ayala luego de someterse al implante de colágeno como tratamiento para agrandarse los glúteos. Danilda Victoria Ruiz Díaz, otra procesada en la causa, está con paradero desconocido.
La resolución dictada hace alusión a que el hecho investigado es considerado delito y además es un hecho culposo, por lo que -a criterio de esta magistratura- corresponde la aplicación de medidas menos gravosas, indicó el magistrado. Agregó que la procesada, al presentarse, demostró su intención de someterse a la Justicia, por lo tanto la decisión es que pueda seguir el proceso en libertad, dijo.
El juzgado dispuso además que la mujer deba presentarse físicamente cada mes, la prohibición de salir del país y la condición de que en caso de volver a cometer algún hecho punible se levanten las medidas aplicadas.
Según las pesquisas, Cintia Raquel Echeguren fue la que contactó con la joven extranjera a quien supuestamente convenció de que el procedimiento era muy sencillo y que no representaba peligro alguno para la paciente. Posteriormente, la llevó junto a la kinesióloga Danilda Victoria Ruiz Díaz, quien se hizo pasar por médica cirujana, pese a no contar con la formación correspondiente.
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Las mismas participaron en el procedimiento, luego de acordar un monto determinado. Este consistió en la aplicación de hidrogel de colágeno con la finalidad de aumentar el volumen de los glúteos.
Días después se produjo el fallecimiento de la paciente en el Hospital Regional de Ponta Porã. Los médicos indicaron que, por las características, el hidrogel ingresó al torrente sanguíneo, lo que ocasionó una embolia pulmonar que a su vez le produjo una hemorragia pulmonar.
La Policía allanó la casa perteneciente a Cintia Echeguren, donde se hallaron varios medicamentos utilizados en ese tipo de procedimientos y una cama terapéutica, por lo que se presume que existirían otras víctimas que también se sometieron a procedimientos similares.
Danilda Victoria Ruiz Díaz, otra procesada en la misma causa, está con paradero desconocido y ya cuenta con orden de captura. Tiene otro proceso abierto por la muerte de otra joven que se realizó un procedimiento similar.
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