Nunca antes se había generado una vacuna con tanta celeridad como sucedió con los productos para mitigar la propagación de la covid-19. ¿Cómo evolucionó la ciencia?, ¿cuáles fueron los principales avances médicos? En una entrevista para revista Perfil, Bradley Silcox, gerente general Pfizer Centroamérica y el Caribe, nos detalla lo que ha implicado el esfuerzo por buscar soluciones médicas desde una de las farmacéuticas más destacadas en esta pandemia.
– ¿Cuáles fueron los principales avances científicos e innovaciones desarrolladas para combatir la pandemia?
La pandemia que vivimos actualmente le ha brindado a la industria farmacéutica la oportunidad de demostrar un esfuerzo de trabajo sin precedentes en búsqueda de soluciones, en conjunto con los diferentes sectores de la sociedad.
Dado este panorama y guiados bajo nuestro compromiso de llevar innovaciones que cambien la vida de los pacientes, en enero de 2020, al conocer la secuencia genética del SARS-CoV-2, Pfizer y BioNTech nos aliamos para investigar, desarrollar y producir una vacuna de última tecnología basada en ARNm.
También, diseñamos toda una infraestructura logística para almacenar y transportar la vacuna en óptimas condiciones, por ejemplo, contenedores térmicos especiales para trasladar la vacuna en condiciones de frío extremo con hielo seco, que contienen un GPS y sensores térmicos para un monitoreo permanente de temperatura, localización en tiempo real y así asegurar que lleguen a las autoridades de salud de los países en las condiciones idóneas para su aplicación. Al mismo tiempo, desarrollamos alianzas estratégicas para garantizar el flujo transfronterizo de las vacunas, diseñamos rutas y simplificamos procesos con el fin de acortar los tiempos de entrega y llevar la vacuna a la mayor cantidad de personas, en el menor tiempo posible.
Es un hecho que, mientras la pandemia ha ido avanzando, también nos ha permitido trabajar de manera colaborativa y ser mucho más innovadores. Encontramos nuevas formas de usar la tecnología y la ciencia en beneficio de la atención de la emergencia sanitaria, de los pacientes y de ayudar a prevenir, tratar o curar enfermedades; de asociarnos con distintas empresas y con agencias reguladoras, así como de elaborar propuestas innovadoras de acceso y trabajar en equipo, con el único fin de velar por la salud pública mundial.
– ¿En qué otros aportes médicos se encuentran trabajando actualmente?
Continuamos avanzando en el histórico ensayo clínico de la vacuna Pfizer/BioNTech contra COVID-19 y en estudios en poblaciones especiales como son mujeres embarazadas y niños menores de 12 años, así como los estudios clínicos relacionados con una tercera dosis y nuevas variantes. También, estamos llevando a cabo investigaciones para evaluar la seguridad y tolerabilidad de los pacientes ante un nuevo tratamiento antiviral oral para el SARS-CoV-2.
Ahora bien, la pandemia ha generado otros nuevos retos a los que hemos tenido que hacerles frente de manera simultánea. Por ejemplo, la afectación en las coberturas de vacunación general contra diversas enfermedades prevenibles y la reducción en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con cáncer y otras enfermedades. Bajo este contexto, en Pfizer analizamos estos retos e identificamos oportunidades en donde podemos colaborar con soluciones de valor, tal es el caso de la telemedicina, entrega de medicamentos a domicilio y educación continua dirigida a pacientes, para que puedan tener un mejor control de su salud.
De este modo, al mismo tiempo que innovamos y colaboramos para hacer frente a la pandemia, nuestro equipo continúa trabajando en importantes innovaciones para otras áreas terapéuticas, como, por ejemplo, nuestra plataforma de medicina de precisión, lo cual nos da la oportunidad de desarrollar terapias innovadoras que se adaptan a las necesidades de determinados pacientes -personas adecuadas con los medicamentos correctos-. Estamos aprovechando la experiencia en oncología para ampliar los beneficios de la medicina de precisión hacia áreas como las enfermedades raras y la inmunología.
– Una vez superada la pandemia, ¿cuáles desarrollos científicos podrán seguirse aprovechando en la medicina?
En definitiva, una de las tecnologías que se puede seguir aprovechando en beneficio de la medicina es la tecnología de ARNm. Previo a la pandemia, ya Pfizer y BioNTech habían establecido una alianza para investigar y desarrollar vacunas basadas en esta tecnología, por ejemplo, en el marco de la prevención de la influenza; esta misma fomentó el trabajo conjunto que, a hoy, nos permite aportar una vacuna -con autorización de uso de emergencia- para prevenir la enfermedad de COVID-19.
A diferencia de las vacunas convencionales, las vacunas de ARNm pueden desarrollarse más rápidamente usando solo el código genético del patógeno (secuencia genética). Estas trabajan introduciendo la estructura de ARNm en el cuerpo y las células usan dicha información para construir una proteína llamada antígeno, que será específica al patógeno a combatir, como es el SARS-CoV-2. El sistema inmune reconoce dicho antígeno y crea inmunidad contra este.
Otro de los proyectos que puede continuarse implementando es la habilitación de las diferentes investigaciones clínicas de forma digital, a manera de permitir un mejor acceso de los participantes e incrementar la diversidad e inclusión con una población representativa, tal cual lo hemos hecho hasta ahora con nuestros estudios de la vacuna contra COVID-19 y de otras áreas.
Ese acompañamiento digital también podrá seguir de la mano de actuales y futuras plataformas de telemedicina, así como de aplicaciones que les permitan a los pacientes llevar un control más integral de su enfermedad, ya sea desde un dispositivo móvil o tableta, y apoyar a los profesionales de la salud en la ejecución de sus labores de consulta o educación continua.
Otra de las tendencias que seguirá en auge es el desarrollo de terapias dirigidas para diferentes enfermedades -como las oncológicas, de inflamación y las mismas enfermedades raras-, a través de proyectos de Investigación y Desarrollo como los son la medicina de precisión y la terapía génica, con el fin de seguir adaptando el tratamiento a las características individuales de cada paciente y brindar una mejor calidad de vida.
Finalmente, una práctica de gran relevancia y que irá cobrando aún más fuerza durante los próximos años, son los acuerdos innovadores de acceso. Desde Pfizer, continuaremos trabajando de la mano con gobiernos y autoridades para cuidar la salud de los pacientes y mejorar el acceso a terapias innovadoras -en pro de una mejor calidad de vida-, a través de soluciones basadas en evidencia del mundo real, que permitan optimizar la atención y experiencia del paciente, al mismo tiempo que contribuimos con el fortalecimiento y la sostenibilidad de los sistemas de salud.
– ¿Qué implicó tener información nueva sobre el virus y las respuestas a la vacuna, cada día?
Al conocer la secuencia genética del SARS-CoV-2, en enero de 2020, se disparó la búsqueda de una potencial vacuna en todo el mundo. Diversas empresas nos abocamos a investigar y desarrollar diferentes opciones, para prevenir la enfermedad de COVID-19. Hoy en día, la
ciencia ha recopilado grandes evidencias sobre el comportamiento del virus, su forma de transmisión y ciertas maneras efectivas para protegernos de este e inclusive, tratarlo.
Por ejemplo, ciertos países que administran la vacuna de Pfizer y BioNTech están trabajando para documentar su impacto. Uno de ellos es Israel, que ya ha publicado algunos resultados muy alentadores en relación con el impacto posterior a su implementación, reportando un 94% de disminución en la tasa de infecciones y un 92% de reducción en la tasa de casos severos.
En definitiva, son resultados muy alentadores de los beneficios de nuestra vacuna y nos llena de optimismo esperar los resultados de estudios actuales.
Conocer cómo seguirá evolucionando el virus es un gran enigma, ya que cada vez que el SARS-CoV-2 se transmite de una persona a otra, realiza pequeños cambios en su código genético, lo que ha generado diversas mutaciones. Hoy, gracias a estudios in vitro que hemos desarrollado en los últimos meses, se conoce que nuestra vacuna genera anticuerpos que neutralizan el SARS-CoV-2 con mutaciones clave presentes en las variantes británica, delta, sudafricana y brasileña.
Aun así, desde Pfizer y BioNTech continuamos vigilando el comportamiento del virus SARS-CoV-2, sus variantes y nueva información para responder y aportar nuestro conocimiento, talento humano y experiencia para el desarrollo de una solución.
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